Hay escenas realmente bellas y cautivadoras, donde definitivamente Shyamalan nos introduce en una fábula con mensaje, un cuento animado con sus grandes y buenas intenciones; y hay otras, a medida que la trama se torna más grave, donde parece que el autor pierde interés por la historia, convirtiendo los pasos que nos llevan al desenlace de la película* en una memez suprema.
No dejaría de ser una broma, un chiste malo de 110 minutos si no fuera por sus protagonistas: Paul Giamatti, grande como siempre, y Bryce Dallas Howard, transformada en una criatura de rasgos tan extraños como bellos.
Nota:Un 5,5
*El niño y las cajas de cereales??? Ole tus huevos Shyamalan. Ole.
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